¿Se puede tratar el cáncer de páncreas con nanofármacos?
Nueva estrategia para atacar un tumor contra el que faltan tratamientos eficaces
Queremos atacar el cáncer de páncreas desde tres frentes a la vez para evitar que las células se vuelvan resistentes a los fármacos y poder mejorar así el tratamiento de la enfermedad”, explica María Jesús Vicent, investigadora del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) en Valencia. “Nos hemos centrado en el cáncer de páncreas porque suele diagnosticarse tarde, cuando ya ha causado metástasis, y aún no tenemos ningún tratamiento eficaz a largo plazo”.
Su estrategia consiste en combinar un nanofármaco con una nanovacuna. El nanofármaco está diseñado para reconocer las células tumorales y de este modo no causar daños en células sanas. Actúa como un medio de transporte que llega hasta las células cancerosas y entrega allí dos paquetes bomba para destruirlas. Les entrega, por un lado, un compuesto de quimioterapia; por otro, un compuesto llamado inhibidor de PARP que impide que las células tumorales puedan reparar su ADN.
La nanovacuna está diseñada para activar el sistema inmunitario de manera que produzca linfocitos capaces de reconocer y de destruir las células tumorales. Con esto se espera que la eficacia del tratamiento se pueda mantener a largo plazo, evitando que el tumor regrese.
A todo ello se añade un fármaco para silenciar el gen KRAS, que es clave en la progresión del cáncer de páncreas.
Para sacar adelante el proyecto, Vicent se ha asociado a Helena Florindo, especialista en vacunas de la Universidad de Lisboa (Portugal), y a Ronit Satchi-Fainaro, oncóloga de la Universidad de Tel Aviv (Israel).
En experimentos realizados con cultivos de células tumorales, con organoides y con ratones, han demostrado que las tres armas –el nanofármaco, la nanovacuna y el inhibidor de KRAS- son eficaces a corto plazo cuando se administran por separado.
Su próximo objetivo es administrarlas juntas en ratones a los que se han implantado tumores de páncreas para ver si consiguen prolongar la eficacia a más largo plazo. Si los resultados son positivos, posteriormente solicitarían autorización para realizar un ensayo clínico en personas. Questions for the future: una investigación financiada por “la Caixa”