Trucos para adolescentes con sobrepeso
Texto de Magda Carlas, nutricionista
Tratar el sobrepeso en la adolescencia no es fácil. Los chicos y las chicas tienen ya un criterio, hábitos dietéticos adquiridos y una vida fuera e casa no siempre controlable. El consejo profesional será siempre imprescindible, en general. Pero estas pautas pueden valer en casa:
La trascendencia del sobrepeso. El adolescente debe entender que el exceso de peso puede comprometer su salud, que no es una cuestión estética y que no es obligatorio estar delgado, sí intentar estar sano.
Tener un abanico de entrantes para paliar el apetito. Como palitos de zanahoria con salsa de yogur, montaditos de manzana con queso fresco, un vaso de gazpacho…
Platos servidos en la cocina. Evitar las fuentes y llevar a la mesa los platos con la ración correcta. Es la mejor manera de no repetir.
Texturas consistentes. Si la textura requiere una masticación más prolongada, la ingesta es menor. Con un adolescente muy comedor, es mejor evitar cremas y purés.
Optar por el plato único. Con los alimentos adecuados es, en general, menos calórico y visualmente más satisfactorio. Si se sirven primer y segundo plato, un corto tiempo entre uno y otro hace que aumente la sensación de saciedad.
Guarniciones originales. Ellos suelen ser fans de las patatas fritas, pero se les puede mostrar otros mundos: una patata asada, flan de arroz salvaje, dados de manzana salteados.
Platos sanos atractivos. Macarrones con setas, pizza casera de verduras, un huevo frito “a la plancha”… tienen menos energía que la pasta, pizza o huevo convencional.
Postre: fruta. Hay que hacerles apostar por la fruta. Pero un chorro de chocolate caliente, frutos secos picados o un puré de frutos rojos hacen más deliciosa la macedonia.
Despensa saludable. Mejor no tener alimentos conflictivos en casa y dar los caprichos en pequeñas dosis.
No culpabilizarle. Será difícil que el adolescente coma sano si en casa gustan los festivales gastronómicos. La familia debe seguir el mismo menú, ser su aliada contra el sobrepeso sin agobiarle ni culparle.