Hay más fracturas por osteoporosis que la suma de infartos de miocardio, cáncer de mama y embolias cerebrales
La de cadera es una de las más frecuentes y una de las más graves
Un 82% de las mujeres mayores de 45 años no consume el calcio necesario
Sofía Larrucea
Los expertos coinciden, a pesar de que los nuevos antirresortivos, como el denosumab, y los osteoformadores, como el teriparatida, han supuesto una mejora contra la pérdida de hueso, lo fundamental sigue siendo la prevención de las fracturas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 40% de las mujeres mayores de 50 años sufrirá alguna fractura debido a la osteoporosis. Además, se estima que el número de fracturas por osteoporosis que se da en un año entre las mujeres es superior a la suma de casos de de infarto de miocardio, cáncer de mama y embolia cerebral. Una tendencia que, además, irá en aumento. A pesar de que un 80% de la masa ósea viene determinada por la herencia genética, en el 20% restante influyen factores como los hábitos de vida. Evitar el alcohol, el tabaco y el sedentarismo, así como seguir una dieta equilibrada y rica en vitamina D y calcio son claves a la hora de evitar una fractura ósea.
La de cadera es una de las más frecuentes y una de las más graves. Un 8% de las personas que la sufren fallecen pasado un mes, mientras que transcurrido un año, el porcentaje de mortalidad aumenta a un 30% de los casos. Por debajo de los 65 años de edad, sin embargo, las más comunes suelen ser las fracturas vertebrales y de muñecas. Pero indistintamente del tipo de fractura que se trate, todas presentan un aspecto en común, que es el deterioro de la calidad de vida que conlleva en la persona y que supone un gasto en el sistema sanitario de hasta 10.000 euros por paciente. Uno de los motivos que podrían explicar la alta incidencia de la osteoporosis es debido a los malos hábitos de vida. Un 82% de las mujeres mayores de 45 años no consume el calcio necesario y las intolerancias que dicen sufrir han sido hasta ahora uno de los motivos principales. Aspecto que, no obstante, ya se demostró en el estudio Dasio que podía solucionarse mediante la ingesta diaria de un lácteo fermentado con calcio y vitamina D. El estudio, liderado por cuatro especialistas españoles, contó con la participación de un total de 909 mujeres mayores de 50 años. Un 96% de las participantes tomó de forma diaria el suplemento y la mayoría manifestó, al final del proceso, que dicho lácteo fermentado con calcio y vitamina D no le generó ningún tipo de molestia gastrointestinal.