La Enfermedad Inflamatoria Intestinal, más complicada en niños que en adultos
Hasta un 35% de las personas diagnosticadas de esta afección durante la infancia padecieron un retraso en el crecimiento
Una nueva vía subcutánea para administrar el tratamiento permite que los pacientes puedan administrarse la medicación sin necesidad de acudir al hospital
Sofía Larrucea
Son múltiples los estudios que demuestran que los más pequeños son los que más complicaciones presentan al sufrir una Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII), dolencia que engloba a dos trastornos inflamatorios: la enfermedad de Crohn y la Colitis Ulcerosa. Actualmente, esta enfermedad de causa desconocida pero mediada inmunológicamente afecta a más de 130.000 personas en España, además, su incidencia entre la población infantil se ha triplicado en los últimos 20 años. Unos datos tan reales como desalentadores. Si bien la enfermedad es perjudicial a cualquier edad, en los niños puede agravarse aún más, afectando tanto a la esfera física como social. Se sabe que en la enfermedad de Crohn, por ejemplo, hasta un 35% de los menores que la padecen verán afectado su proceso de crecimiento, y la mitad de ellos también padecerá una falta de socialización. Un abordaje multidisciplinar es, para muchos especialistas, fundamental.
Tanto la enfermedad de Crohn como la Colitis Ulcerosa son diferentes pero comparten una serie de características. Un de ellas es que las dos pueden afectar al proceso de crecimiento. La EII suele aparecer entre los 12 y 16 años de edad, momento en el que la velocidad de crecimiento y la formación del hueso es mayor. Estas particularidades conllevan a que haya un mayor riesgo de desnutrición, de retraso en el crecimiento y de osteoporosis. “Esta afección produce que aquella energía que debería estar canalizada en otros procesos importantes como es el crecimiento o la maduración sexual, por ejemplo, se vea consumida por la inflamación”, alerta Javier Martín de Carpi, coordinador de la primera unidad en nuestro país para el Cuidado Integral de la Enfermedad Intestinal Pediátrica del Hospital Sant Joan de Déu, en Barcelona. Centro desde donde se defiende, a su vez, el abordaje multidisciplinar como elemento clave para mejorar el pronóstico y la calidad de vida de estos pacientes. Sin olvidar la importancia que representa disponer de tratamientos efectivos y cómodos para el día a día de los afectados. En este sentido, la aparición del fármaco anti-TNF por vía subcutánea aprobado recientemente para la población pediátrica ha supuesto una gran mejora. Si bien hasta hace poco los pacientes se veían obligados a acudir a su centro hospitalario cada dos meses para someterse al tratamiento por vía intravenosa, con los fármacos por vía subcutánea eso ya no es necesario. La nueva vía de administración presenta la misma eficacia que la vía convencional, pero con la diferencia de que esta permite a los pacientes administrarse el fármaco en su propia casa cada 15 días. Sensi Domínguez, paciente y madre de dos hijos (Hanníbal y Clara), también con la enfermedad de Crohn, así lo cuenta, “para nosotros ha supuesto un gran cambio y mis hijos pueden realizar una vida prácticamente normal, podemos irnos de vacaciones sin preocupaciones”. “Se trata de un método muy cómodo- concluye- que solo requiere disponer de una nevera para poder conservar la medicación”.