Una muestra de sangre y saliva permitiría detectar tumores de cabeza y cuello
Un equipo de investigadores estadounidenses de la Universidad Johns Hopkins y del Instituto Médico Howard Hughes ha demostrado que el análisis de la sangre o de la saliva puede ser útil para detectar el cáncer de cabeza y cuello. Este análisis, sencillo e indoloro, podría servir para detectar el tumor, la recaída o la respuesta a un tratamiento. Anteriormente ya se había descubierto la utilidad de este tipo de análisis para otros tipos de cáncer.
Más de medio millón de personas recibe un diagnóstico de cáncer de cuello o cabeza cada año, convirtiéndolo en el séptimo cáncer más común en todo el mundo. El diagnóstico de algunos de estos tumores es tardío y las recaídas también suelen detectarse tarde. Algunos de los tumores que engloba esta categoría de cánceres son el carcinoma de células escamosas de la cavidad oral (boca y lengua), laríngeos, hipofaríngeos y los orofaríngeos (incluida la base de la lengua). Estos últimos están aumentando, particularmente entre hombres jóvenes, por su vinculación con la infección del papilomavirus.
El genoma de las células tumorales presenta mutaciones que hacen que un tumor sea más o menos resistente o sensible a un tratamiento. Ese ADN es liberado fuera de las células cuando estas mueren y puede detectarse en los fluidos. Por ello, la prueba sería como una biopsia del tumor pero a partir de un fluido, por ello se denominan “biopsias líquidas”. Estas biopsias son útiles porque hasta el momento no se tenían marcadores sanguíneos de utilidad, y abren puertas para realizar otras investigaciones que constaten estos prometedores resultados.