Trasplantado con éxito el primer niño burbuja detectado en Catalunya
Nació sin sistema inmunitario y se le hizo un trasplante de cordón umbilical en Vall d’Hebron.
El primer niño con una inmunodeficiencia combinada grave (niño burbuja) detectado gracias al cribado neonatal implementado por el Departamento de Salud en 2017 ha sido trasplantado con éxito y ya está curado. Derek nació sin sistema inmunitario. Después de un trasplante de sangre de cordón umbilical realizado en Vall d’Hebron, ya tiene sistema inmunitario y puede hacer una vida normal. Actualmente tiene 13 meses.
La detección de la inmunodeficiencia combinada grave en la prueba del talón se realiza en los neonatos durante las primeras 48 horas de vida. En marzo de 2018, Derek fue el primer niño al que se le detectó la patología gracias a la prueba del talón. La inmunodeficiencia combinada grave (popularmente conocida como la patología de los “niños burbuja”) es una enfermedad grave y potencialmente mortal. Los niños que nacen con esta patología no producen linfocitos correctamente.
Su sistema inmunitario no funciona correctamente y no se pueden defender de las infecciones por virus, bacterias u hongos. Un resfriado contagiado por un familiar puede poner en peligro su vida. Hay dos únicas alternativas terapéuticas para proporcionar un sistema inmunitario a estos niños y evitar su muerte: el trasplante de progenitores hematopoyéticos (ya sea de médula ósea, sangre periférica o cordón umbilical) y la terapia génica. La realidad es que sin trasplante estos niños no acostumbran a pasar del año de vida.
La probabilidad de supervivencia después del trasplante aumenta hasta el 95%, señala Pere Soler, jefe de la Unidad de Patología Infecciosa e Inmunodeficiencias de Pediatría.
La sangre del cordón umbilical contiene un elevado número de células madre que se pueden convertir en células del sistema inmunitario en el receptor. “Gracias al trasplante, el organismo de Derek empezó a desarrollar el sistema inmunitario paso a paso”, añade Soler. Un mes después de recibir el trasplante, Derek ya había desarrollado un sistema inmunitario suficiente para ir a casa.