Cuidado Activo, una alternativa flexible para las personas mayores
Las estancias pueden ser de toda la semana a unas horas, tanto de día como de noche
C.Q. Si echamos la vista 50 años atrás veremos cómo la sociedad se ha transformado enormemente en casi todos los ámbitos. Vivimos en una democracia, tenemos otra moneda, casi todo se financia, las familias no llegan a los dos hijos de media y la mujer trabaja fuera de casa. Y vivimos más. La esperanza de vida se sitúa por encima de los 80 años. En definitiva, la sociedad se ha ido modificando para adaptarse a la situación actual. Con ella, han aparecido también nuevas problemáticas, como la conciliación familiar.
El envejecimiento de la población es uno de los aspectos que plantean nuevos desafíos. Las personas mayores con frecuencia sienten que ya no son útiles y empiezan a tener sentimientos de frustración y soledad. Al mismo tiempo, los familiares desarrollan sentimientos de abandono al no poder atender cómo quisieran a sus progenitores. Por ello, los centros de día son cada vez más demandados. Pero ahora, además, algunos centros ofrecen estancias temporales de noche, de día o de fin de semana.
Algunos de éstos, como el de Sanitas Residencial Bonaire, han puesto en marcha programas para atender estas necesidades concretas. Suelen ser familiares que no quieren ingresar permanentemente a su familiar en una residencia pero ya sea por sus largas jornadas laborales o por necesidades puntuales, como puede ser un viaje o una rehabilitación por una operación, necesitan de un centro temporal. A veces simplemente es una manera de que la persona mayor no se sienta sola. Y es que estas residencias son una manera de hacer amigos y conocer personas con las que comparten experiencias.
Según las necesidades de cada persona, éstas pueden ofrecer alojamiento el día completo, por la mañana, por la tarde o por horas. Algunas personas sólo quieren que el familiar acuda entre semana, por trabajo, por ejemplo, otras prefieren únicamente los fines de semana, un solo día, o, incluso, hasta 15 días. Asimismo, las estancias pueden ser diurnas o nocturnas. La gente tiene un concepto peyorativo de las residencias, pero muchas veces la experiencia temporal es tan buena que acaba convirtiéndose en permanente, afirma Vicenç Badia, director de Sanitas Residencial Bonaire. Además, los familiares pueden involucrarse en las actividades que organizan los centros.
Generalmente estos programas de estancias no permanentes cuentan con traslados desde la casa de la persona al centro en vehículos adaptados. El objetivo es que el envejecimiento sea saludable y la persona mayor conserve su calidad de vida. En estos centros pueden realizar actividades, juegos y excursiones que se adapten a su nivel de movilidad. Además, ofrecen desde peluquería e higiene personal a revisiones médicas, fisioterapia o tratamiento psicológico individual.
El protocolo de ingreso es rápido y sencillo, cuando una persona llega por primera vez al centro se le realiza una evaluación inicial y, en función de sus necesidades, se le planea un modelo de actividades u otro. Es lo que conocen como Plan de Atención Individual (PAI) que tiene en cuenta todos los detalles del cuidado, además de sus gustos y preferencias.