Tecnología auditiva potente y cómoda
La pérdida auditiva no solo dificulta la comunicación, también impacta la calidad de vida, las relaciones sociales y el bienestar emocional. Afortunadamente, la tecnología auditiva ha avanzado a pasos agigantados. Hoy, existen soluciones tan potentes como cómodas, capaces de adaptarse a diferentes niveles de hipoacusia sin comprometer el confort ni la estética. Una de las más destacadas es el uso de audífonos retroauriculares.
¿Qué son los audífonos retroauriculares?
También conocidos como BTE (Behind The Ear), los audífonos retroauriculares se colocan detrás de la oreja. El sonido se transmite a través de un tubo delgado que llega a un molde adaptado al canal auditivo. Este diseño permite una amplificación potente, ideal para personas con pérdida auditiva severa o profunda.
Su mayor ventaja es la versatilidad. Son adecuados para cualquier edad, desde niños hasta adultos mayores, y pueden personalizarse en diferentes tonos de piel o cabello para pasar casi desapercibidos.
¿Quiénes los necesitan?
Los audífonos retroauriculares son especialmente útiles para personas con hipoacusia moderada a severa. También son recomendables en casos de tinnitus (zumbidos en los oídos) o cuando se requiere una mayor amplificación sonora. La Organización Mundial de la Salud estima que para 2050, una de cada diez personas sufrirá algún grado de pérdida auditiva, por lo que el acceso a estos dispositivos será cada vez más relevante.
Potencia sin sacrificar comodidad
Contrario a lo que muchos piensan, más potencia no implica más incomodidad. Los modelos actuales son sorprendentemente ligeros, resistentes y ergonómicos. Incorporan materiales hipoalergénicos y diseños que se ajustan con precisión, eliminando molestias durante el uso prolongado.
Además, a pesar de su tamaño ligeramente mayor que otros tipos de audífonos, los retroauriculares ofrecen más espacio para incluir componentes avanzados como micrófonos direccionales, conectividad Bluetooth y filtros de reducción de ruido. Esto los convierte en dispositivos completos que van mucho más allá de simplemente amplificar el sonido.
Tecnología inteligente para la vida diaria
Algunos modelos integran funciones inteligentes que se conectan al teléfono móvil, permitiendo al usuario controlar el volumen, cambiar configuraciones y hasta recibir llamadas directamente en el audífono. Esta conectividad ha revolucionado el uso diario, haciéndolos más intuitivos y fáciles de adaptar al entorno.
Eso sí, es importante señalar que la mayoría de los modelos retroauriculares no tienen batería recargable, lo que implica cambiar las pilas con cierta regularidad. A cambio, ofrecen una mayor autonomía y fiabilidad en ambientes exigentes.
Uno de los factores clave para una buena experiencia es la adaptación. Centros especializados como Audicost aplican un protocolo de adaptación progresiva, diseñado para facilitar la transición sin molestias. Además, ofrecen pruebas gratuitas de hasta 30 días, sin compromiso, para asegurarse de que el usuario esté completamente satisfecho con el dispositivo.
Otro punto a favor: el seguimiento es de por vida. Ajustes, revisiones y mantenimiento corren por cuenta del proveedor, lo que garantiza un soporte continuo y sin coste adicional.
Invertir en salud auditiva es apostar por una mejor calidad de vida. Gracias a los avances en tecnología, hoy es posible contar con audífonos retroauriculares que combinan potencia, comodidad y personalización. Si sospechas que has perdido audición, no lo ignores. Una revisión a tiempo y el audífono adecuado puede marcar la diferencia. R.