Como mejorar el diagnóstico (y el pronóstico) del cáncer de pulmón
Ingrid Ramon, entrenadora de Blat (Argus Dogs. Perro de asistencia y detección).
Por Àlvar AgustÍ, Director, Instituto Respiratorio Hospital Clínic de Barcelona
El cáncer de pulmón es el tumor maligno más frecuente en el hombre (pronto lo será también en la mujer) y el que mayor mortalidad causa en el mundo. Sin embargo, se da la paradoja que el cáncer de pulmón es curable. Para ello es necesario que se diagnostique en etapas iniciales de la enfermedad, cuando puede ser extirpado quirúrgicamente. Desgraciadamente, ello ocurre en una minoría de pacientes porque, en etapas iniciales el cáncer de pulmón es mayoritariamente asintomático. Para abordar este problema, en los últimos años se han explorado diversas alternativas diagnósticas. La que está mejor estudiada consiste en el empleo de tomografía axial computarizada (TAC) en fumadores o exfumadores de más de 50 años de edad. En estos individuos, el uso de TAC se ha demostrado eficaz para identificar tumores todavía asintomáticos que han podido ser intervenidos y curados, con lo que la mortalidad se ha reducido de forma significativa. Otra alternativa menos conocida pero potencialmente importante es el análisis del aliento, lo que en ingles se conoce con el nombre de breathomics. Para ello, se puede utilizar tecnología desarrollado por el ser humano (por ejemplo, la denominada “nariz electrónica”) o aprovechar la enorme capacidad olfativa de los perros. A nadie extraña ver perros adiestrados para detectar explosivos, drogas o para encontrar a personas atrapadas después de algunas catástrofes naturales, como terremotos o inundaciones. Estudios recientes en nuestro centro, liderados por dos cirujanos torácicos que se enfrentan cada día a pacientes con cáncer de pulmonar (los doctores Guirao y Molins) han demostrado que un perro adecuadamente adiestrado puede identificar con gran precisión el aliento de aquellas personas que padecen cáncer de pulmón (https://elpais.com/elpais/2019/09/30/buenavida/1569855562_919869.html). El reto tecnológico actual consiste en desarrollar una nariz electrónica que iguale o supere el olfato del mejor amigo del hombre y de la mujer.
