“Donde haya más casos se podrán relajar más las medidas”
Pere Godoy, presidente de la Sociedad Española de Epidemiología
El presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, Pere Godoy, nacido en Lleida hace 64 años, todavía no ha visto el detalle del plan del Instituto de Salud Carlos III para hacer más de 64.000 pruebas (a unas 30.000 familias) de detección del SARS-CoV-2 en la población para combatir la epidemia, así que va con cautela. Pero hay aspectos en los que no duda a la hora de opinar.
Pregunta. 62.000 pruebas son muchísimas. Hay encuestas electorales que se hacen con 3.500, y las mejores del CIS, con algo más de 10.000. ¿Hacen falta tantas para saber cómo estamos?
Respuesta. Hacen falta muchas porque la distribución del virus está siendo muy heterogénea. Al tomar tantas muestras se puede obtener una situación detallada por comunidades autónomas y hasta por provincias. Incluso se puede ir más allá, y tener datos del nivel de anticuerpos en los profesionales sanitarios. Por eso, ese mínimo de 600 pruebas por provincia no está mal.
- ¿Es habitual llevar a cabo estos trabajos?
- La seroprevalencia se estudia habitualmente. Por ejemplo, se hace con el sarampión, las paperas y la rubeola, porque complementan la información que tenemos, aunque existan vacunas y sean enfermedades de declaración obligatoria. Por ejemplo, con el sarampión sabemos que hay un grupo nacido en los setenta que no está inmunizado.
- ¿Cuál es la utilidad principal de este tipo de estrategias?
- La infraestimación de casos, esos 140.000 que se dan de forma oficial, es una infranotificación clamorosa. Este estudio es la única forma de saber dónde estamos y es indispensable para las próximas etapas de retirada de medidas de aislamiento, lo que hemos llamado desescalada. Podremos ver si hay que tomar medidas diferentes en función de los territorios. Hay que tener en cuenta que somos de los primeros países, con China e Italia, que vamos a iniciar este proceso, del que hay muy poca evidencia científica porque no se ha dado esta situación antes. Habrá que ir con mucho cuidado porque estamos en terreno desconocido. Lo tendremos que hacer tanteando y con mucha vigilancia. Porque además partimos de unos niveles de transmisión altísimos. Parece que hemos llegado al pico de transmisiones, pero estas cifras van a bajar muy despacio.
- ¿Esas diferencias entre regiones que dará el estudio se notarán en las medidas de desescalamiento?
- Yo diría que los datos de Sanidad representan menos del 10% de los reales. Y se dará la paradoja de que en las zonas donde hay más casos se podrán relajar más las medidas, dentro de que haya unas directrices comunes, porque habrá más población ya inmunizada —dure lo que dure esa protección, que todavía no lo sabemos— en las que se podrán tomar medidas menos rigurosas. E. de Benito