La mitad de los hombres mayores de 50 años padece alopecia androgenética
Esta afección puede ocasionar un gran impacto emocional, sobre todo entre los más jóvenes
Sofia Larrucea
Aunque también puede afectar a mujeres, la alopecia androgenética es la forma de calvicie más habitual entre la población masculina. Concretamente, cinco de cada diez hombres mayores de 50 años la padece. Las causas de este tipo de alopecia se relacionan, en la mayoría de los casos, con factores genéticos y hormonales. En los hombres el desencadenante es la enzima 5-alfa-reductasa, que convierte la testosterona en dihidrotestosterona (DHT) y que, junto con una predisposición genética, provoca la reducción del número de folículos pilosos, haciendo que el pelo sea cada vez más fino y ligero hasta su desaparición. Se trata de una afección que puede ocasionar un gran impacto emocional y, por lo tanto, puede repercutir en las relaciones personales, sociales y laborales, sobre todo entre los hombres más jóvenes.
Por ello, no resulta extraño que, tal y como indica Rebeca Bella, dermatóloga de la unidad de tricología del Hospital 9 de Octubre de Valencia, cada vez sean más los interesados en tratar la calvicie. La alopecia androgenética se puede combatir y son muchos los avances que han permitido que dicho tratamiento cada vez sea más fácil y cómodo. Aunque, como matiza esta especialista, para que el tratamiento sea lo más efectivo posible, es importante que la terapia empiece justo cuando la persona empieza a notar los primeros síntomas de la calvicie. “Si tratamos el cabello en fases incipientes de caída, podemos volver a estimular la raíz e intentar que vuelva a crecer el pelo. Sin embargo, si pasa mucho tiempo, se produce lo que se conoce como fibrosis y esa raíz, aunque se estimule, es inviable y el único tratamiento posible es el injerto”, explica.
Los tratamientos cada vez son más cómodos y fáciles de aplicar. Si bien el tradicional minoxidil en forma de solución tópica ofrecía buenos resultados, su aplicación en forma de loción presentaba algunas incomodidades para el usuario. Claro ejemplo es el efecto grasiento que podía dejar y que hacía que el cabello pareciese sucio. Sin olvidar los problemas de tolerabilidad que también podía comportar en algunos pacientes. “Los excipientes alcohólicos provocan muchas veces reacciones de dermatitis irritativa, es decir, picor en cuero cabelludo”, asegura la dermatóloga Rebeca Bella. Unos inconvenientes que provocaban, en muchos casos, que la adherencia al tratamiento no fuese la correcta y, en consecuencia, que su efectividad tampoco fuese la deseada. Algo que, sin embargo, ha podido solucionarse gracias a la llegada del minoxidil en forma de espuma. Este, tal y como explica la especialista Bella, es mucho menos “pringoso”, deja mejor el cabello y presenta mayor tolerabilidad. La acción del minoxidil es principalmente vascular. “Clásicamente se había considerado ajeno a la acción de los andrógenos, pero trabajos recientes apuntan a una posible acción sobre los receptores de estos, disminuyendo su susceptibilidad”, concluye la dermatóloga Rebeca Bella.