Investigan las causas del dolor crónico que padecen los afectados de Parkinson
La enfermedad de Parkinson afecta, fundamentalmente, a la capacidad de una persona para controlar sus movimientos, pero parece ser menos conocido el dolor crónico que causa.
A nivel mundial, las estimaciones muestran que más de 8,5 millones de personas padecen la enfermedad de Parkinson, que suele manifestarse en personas mayores, aunque el 20% de los enfermos tienen menos de 50 años y el 10% son diagnosticados antes de los 40. Esta patología causa síntomas motores como lentitud de movimiento, rigidez, temblor e inestabilidad postural y síntomas no motores como depresión, ansiedad, sueño, trastornos gastrointestinales, fatiga y dolor.
Al ser una enfermedad degenerativa sin cura conocida, controlar y tratar los síntomas es vital, especialmente cuando se trata de dolor, no en vano, cerca del 85% de los pacientes experimentan algún tipo de dolor. En base a ello, investigadores de la Universidad de Australia del Sur que han considerado necesario ahondar más, desde el punto de vista científico, en las características y el tratamiento del dolor de esta patología con la esperanza de mejorar en la atención del dolor de los pacientes que la padecen.
Perfil más completo del dolor
Una vez alcanzado el objetivo, estos investigadores esperan poder obtener un perfil completo del dolor que experimentan las personas con Parkinson; una comprensión más profunda de las necesidades de las personas con Parkinson en el manejo de los síntomas del dolor; y, con todo ello, elaborar un conjunto de recomendaciones centradas en el paciente que pueden utilizarse para avanzar en esta patología.
El investigador principal, prof. Anthony Mezzini, considera que el dolor es el principal factor de reducción de la calidad de vida de las personas con Parkinson. “En las personas con esta enfermedad, el dolor puede localizarse en los músculos y las articulaciones, pero también en el sistema nervioso e, incluso, en órganos internos como el estómago y los intestinos. Como resultado, es decir, se puede experimentar, prácticamente, en casi cualquier parte del organismo“.
“El Parkinson es bien conocido por afectar la capacidad de una persona para controlar sus movimientos, pero lo que es menos conocido es que también causa dolor crónico y en algunos casos es tan intolerable e intratable que eclipsa los síntomas motores de la enfermedad”, agrega el prof. Mezzini”.
Esta investigación permite un estudio integral del dolor que experimentan las personas con Parkinson, para posteriormente desarrollar una comprensión más profunda de cómo manejar mejor los síntomas del dolor y crear respuestas de atención centradas en el paciente.
“Para quienes experimentan dolor crónico, puede ser un factor importante de reducción de la calidad de vida. Queremos cambiar esto para mejor para las personas con Parkinson”, concluye el prof. Mezzini. M.T. T. (SyM)