¿Podemos detener el ébola?
Provoca la muerte en la mitad de los casos
Hace un mes la OMS declaró en la República Democrática del Congo el fin de la segunda epidemia más mortífera de ébola, tras un año de combate, que en esta ocasión ha causado unas 3.400 infecciones y más de 2.250 muertes según el Ministerio de Salud del país africano.
El ébola provoca fiebres hemorrágicas muy graves y, en un 50% de los casos, la muerte. Está provocado por un virus muy agresivo que se transmite por contacto directo con los fluidos del cuerpo de una persona infectada, viva o muerta. Aunque se han desarrollado algunas vacunas, hasta el momento no se han evaluado globalmente, y se requiere un tratamiento complementario con antivirales.
La investigadora Carmen Gil, del Centro de Investigaciones Biológicas (CSIC), lidera un proyecto para desarrollar un antiviral efectivo frente al virus del ébola. Basándose en cómo el virus infecta la célula, se ha seleccionado una diana en la que se pueda actuar con un fármaco y así impedir que se desarrolle la enfermedad.
Las células humanas tienen un impedir la entrada del virus a la célula en su superficie, la proteína NPC1, cuya función principal es transportar el colesterol. Y el virus del ébola tiene una proteína capaz de unirse a ese receptor para penetrar en la célula e infectarla.
El objetivo es bloquear esa unión de la proteína vírica con el receptor celular, para impedir la entrada del virus a la célula.
Se están probando diferentes moléculas en modelos celulares, en colaboración con el Hospital 12 de Octubre de Madrid y el NIA. Las que resulten más prometedoras, se enviarán al Institut Bernhard Nocht de Enfermedades Tropicales de Hamburgo en Alemania, para probarlas en el virus completo. Questions for de Future:una investigación financiada por La Caixa