Los problemas con AstraZeneca frenan la ya lenta vacunación en la UE
Alemania apremia a Bruselas para que apruebe y compre la vacuna Spútnik V
Si la vacunación contra la covid en la Unión Europea (UE) ya iba más lenta de lo previsto, la última semana ha sido un drama, después de que la mitad de países comunitarios suspendieran las inyecciones de AstraZeneca mientras se estudiaba si causa efectos secundarios de trombosis graves. Esta semana, la vacunación ha avanzado un tercio de lo que lo hizo las anteriores. Y así, hasta ahora, solo el 10,3% de la población de la UE mayor de 18 años ha recibido una dosis de las vacunas aprobadas y un 4,5% ha completado la inmunización. Alemania mete prisa pidiendo a la comunidad Europea (CE) que se apruebe la vacuna rusa Spútnik V.
A la suspensión de las inyecciones de AstraZeneca por el estudio de 25 casos de trombosis hay que atribuir, sin duda, que la cobertura con la primera dosis aumentara en la UE solo un 0,5% esta semana, cuando las tres anteriores lo hizo un 1,5%, 1,7% y 1,8%. Después de que la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) dijera que no ve relación entre la vacuna y las trombosis, algunos países la vuelven a inyectar (España lo hará el miércoles).
Pero la pugna continúa entre la CE y la farmacéutica. La presidenta comunitaria, Ursula von der Leyen, amenazó ayer a AstraZeneca desde medios alemanes con vetar sus exportaciones fuera de la UE, si no entrega rápido las dosis contratadas. Insistió en que la compañía no entrega las pactadas que fabrica en la UE ni ninguna producida en Gran Bretaña, pero sí envía a este país dosis fabricadas en sus plantas de la UE. Pfizer, la farmacéutica que suministra más vacunas, advirtió que prohibir exportaciones puede poner en riesgo su producción, si el Reino Unido hiciera lo mismo con ingredientes de su vacuna que se fabrican allí: los lípidos que envuelven el delicado material genético.
La canciller de Alemania, Angela Merkel, apremia a Bruselas para que apruebe y compre la vacuna rusa Spútnik V. En una comparecencia anteanoche en Berlín, tras una reunión con los länder sobre la vacunación, dijo que “toda vacuna autorizada por la EMA debería ser utilizada en la UE”, y que espera que haya un pedido global de la UE para todos los países comunitarios como con las otras fórmulas ya aprobadas. Pero si tal compra conjunta de la Spútnik V no se produjera, “entonces Alemania debería actuar por sí misma y eso es lo que haríamos”, precisó Merkel. La EMA ya anunció el 4 de marzo que está examinando la fórmula rusa. En una línea similar se expresó el jueves el ministro de Sanidad, Jens Spahn, quien alertó de que la realidad es que no hay suficientes dosis en Europa para contrarrestar la tercera ola de la epidemia. Merkel dijo también el viernes que está dispuesta a recibir la inyección de AstraZeneca, pero que preferiría esperar a que le toque el turno. Alemania lleva casi cinco meses de cierre total o parcial y la vacunación avanza lentamente: en el país de 83 millones de habitantes han recibido la primera dosis 10,4 millones, de los cuales, 3,2 millones llevan también la segunda. La población se impacienta y al Gobierno federal le llueven críticas por la deficiente gestión.
En la UE se han inyectado 54 millones de dosis de vacunas de la covid, de 67 recibidos. Astra ha suministrado 16,7 millones, Pfizer 46 y Moderna 4,3. Las de Janssen, la cuarta aprobada, se esperan en abril. Otras 550.000 dosis son de la vacuna china Sinopharm y casi 400.000 de la Spútnik, la mayoría inoculadas en Hungría, según el ECDC, el Centro Europeo de Control de Enfermedades. Su contador de la vacunación indicaba ayer que Malta es el país de la UE con mayor cobertura: se ha inyectado una dosis al 18,3% de la población adulta y dos al 8%. Dinamarca es el segundo con más población con la pauta completa, el 6,3%. En España, el 10,4% lleva una dosis y el 4,6% dos.
Según OurWorldinData, la vacunación con una dosis en la UE es del 12% cuando en Gran Bretaña es del 40% o en EE.UU. del 34%. Pero si se mira la inmunización completa, según la universidad Johns Hopkins de EE.UU. que monitoriza la epidemia, en Gran Bretaña solo es del 3%, dada su estrategia de retrasar la segunda dosis para proteger al máximo de población con la primera.
El ministro británico de Sanidad, Matt Hancock, presumía ayer de que ya lleva una dosis la mitad de la población adulta. En Israel el 50% de población lleva las dos y el 12% en EE.UU. La lista de la Johns Hopkins la encabeza Gibraltar: el 63% de su población ha completado la inmunización. Gran Bretaña alcanzó el viernes el récord de 660.000 inyecciones en un día. En España la mayor cifra se dio el 10 de marzo, con 134.000 y esta semana se ha bajado de 113.750 el lunes a 91.514 el jueves, según el portal Statista.
Acelerar la vacunación es crucial. El equipo de Biología Computacional (Biocomsc) de la Universitat Politècnica que analiza la epidemia, incluía el viernes en su informe a la CE un estudio que señala que cuando un país inyecta la primera dosis al 10% de población, a los 30 o 40 días, nota una reducción de los casos de covid y muertes. Se vio en Israel, EE.UU., Gran Bretaña y Emiratos. Ese efecto protector llegaría en España a principios de mayo.
Hasta entonces habrá que mantener restricciones de actividad y movilidad para contener los contagios, apunta el analista Daniel López-Codina. O más allá si aumenta la incidencia, pues la vacunación no reduciría los casos graves y muertes hasta no cubrir a toda la población de más riesgo. En Malta, por ejemplo, suben los contagios. María-Paz López (LV)