Desvelan un nuevo mecanismo con valor pronóstico en el cáncer de hígado
Esta nueva vía molecular también puede observarse en otras células cancerosas, además del cáncer de hígado, lo que sugiere que podría ser un elemento protumorigénico no específico. En España, se diagnostican más de 6.500 nuevos casos de cáncer de hígado.
Un hallazgo sobre determinada señalización molecular podría ser útil para pronosticar la evolución del cáncer hepático. Así se extrae de una investigación llevada a cabo por equipos científicos del Instituto del Cáncer del University College London (UCL); la Universidad de Colonia; el Instituto de Investigación Sanitaria Aragón, y la Universidad de Stuttgart.
Estos investigadores han identificado a LUBAC (siglas de linear ubiquitin biding assembly complex, complejo de ensamblaje de cadenas lineales de ubiquitina) como un elemento clave para la señalización pro-tumorigénica del receptor de linfotoxina β (LTβR).
Este trabajo, publicado recientemente en la revista Cell Death and Differentiation, perteneciente al grupo Nature, tiene importantes implicaciones para comprender los mecanismos moleculares del desarrollo tumoral inducido por inflamación, particularmente en el cáncer de hígado.
El receptor LTβR es bien conocido por su papel en el desarrollo y la maduración de los órganos linfoides, y es capital para el correcto funcionamiento del sistema inmunitario. Sin embargo, su activación también favorece la propagación y el crecimiento de los tumores al activar la secreción de factores proinflamatorios. A pesar de su importancia, hasta ahora no se tenía una comprensión detallada de cómo funciona la señalización de LTβR.
Detalles del funcionamiento molecular
En este estudio, codirigido por Henning Walczak, Diego de Miguel y Nieves Peltzer, y llevado a cabo por Yu-Guang Chen y colaboradores, se ha descubierto que LUBAC es un componente esencial y previamente no reconocido del complejo de señalización LTβR (LTβR-SC).
Han encontrado que las cadenas lineales de ubiquitina generadas por LUBAC facilitan el reclutamiento de varios factores necesarios para ajustar la señalización de LTβR, regulando de manera cooperativa el equilibrio entre la señalización canónica y no canónica de NF-κB. Así, LUBAC es responsable de generar la secreción de citoquinas proinflamatorias y protumorigénicas tras la activación del LTβR mediante la activación de la vía canónica de NF-κB. Rv. Ana Mera, farmacéutica. Barcelona