Cáncer: los hombres duplican el riesgo de morir por la enfermedad
Estudios españoles en pulmón y tumores esofagogástricos evidencian grandes diferencias en sus manifestaciones y que no cabe esperar la misma respuesta a las terapias. Se sabe que el tabaquismo provoca más cáncer de pulmón en la mujer que en el hombre.
¿Por qué el cáncer globalmente afecta más al hombre? ¿Por qué el tabaco provoca más cáncer de pulmón en la mujer? ¿Por qué la eficacia y la toxicidad de los tratamientos difiere según el sexo? Hasta hace relativamente poco no parecía haber demasiado interés por dar respuesta a cuestiones como estas. La infrarrepresentación femenina en los ensayos clínicos oncológicos (estimada entre el 30% y el 40%) tampoco ayuda a clarificar asuntos tan vitales como la respuesta a los tratamientos.
La situación está cambiando y la sensibilización sobre estos aspectos diferenciales está calando en la oncología. Tanto la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO) como la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), a través de su Proyecto Oncogenyx, quieren cubrir lagunas de conocimiento y que la perspectiva del sexo (biología) y el género (la influencia de los factores psicosociales y culturales) se tenga en cuenta en la prevención, diagnóstico y tratamiento de los tumores, afirma Ruth Vera, coordinadora de la Comisión de Mujeres en Oncología de la SEOM.
“El riesgo de morir por cáncer es el doble en el varón que en la mujer, lo que se hace evidente en melanoma, pulmón, laringe, esófago y vejiga”, agregaba el oncólogo Óscar Juan Vidal, del Hospital La Fe (Valencia). También la incidencia está marcada por el sexo: los más frecuentes en cada caso son el de próstata y el de mama, y después hay grandes diferencias en tumores como el tiroides (que afecta mucho más a la mujer) o el de hígado (más habitual en hombres).
El estilo de vida no lo es todo
La mayor frecuencia de cáncer en los hombres se ha atribuido tradicionalmente al estilo de vida. Sin embargo, un amplio estudio epidemiológico auspiciado por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos desmonta que las diferencias en las cifras del cáncer puedan explicarse solo por hábitos como el tabaquismo, la dieta, el ejercicio o el consumo de alcohol.
El seguimiento a 172.000 hombres y 122.000 mujeres permitió analizar sus hábitos de vida e investigar su asociación con 21 tipos de cáncer. El riesgo de desarrollar cáncer en los varones se situó en el 10,4% frente al 7,1% de las mujeres. Pero solo entre un 11% y un 50% de este exceso de riesgo se asoció con factores de riesgo reconocidos, por lo que el resto tendría que explicarse por factores biológicos (u otros factores de riesgo no identificados).
Cáncer de pulmón
De entre los tumores, el de pulmón es el más prevalente y letal, y sigue afectando más a los hombres, aunque las diferencias con las mujeres se acortan. En España se estima que en 2022 se habrán diagnosticado unos 31.000 nuevos casos (8.600 en mujeres) y provocará casi 22.000 muertes, de las que 5.300 serán en población femenina. La mortalidad por cáncer de pulmón en mujeres se ha incrementado un 54% entre 2003 y 2019, de forma que las muertes en esta población han pasado de ser una de cada ocho a una cada cinco. “Llevo en oncología 25 años, y los casos en mujeres en mi consulta antes eran anecdóticos y hoy son una realidad cada vez más frecuente”, advierte Rosario García-Campelo, jefa de Oncología Médica del Complejo Hospitalario A Coruña.
Entre el 85% y el 90% de los casos de cáncer de pulmón se atribuye al tabaco. La oncóloga alerta de la alta frecuencia de tabaquismo en jóvenes, especialmente en chicas, ya que hay datos que evidencian de que a mismo consumo de tabaco, las mujeres presentan más probabilidades de desarrollar un cáncer de pulmón.
Screening y terapias dirigidas
Los cribados en población de riesgo de cáncer de pulmón han demostrado que reducen muertes, pero su impacto también difiere por sexos. Factores como la edad del diagnóstico o el menor consumo de tabaco puede dejar fuera a las mujeres. Los datos Registro de Tumores Torácicos del Grupo Español de Cáncer de Pulmón revelan que el diagnóstico del cáncer de pulmón en la mujer se produce en pacientes más jóvenes y en estadios más avanzados.
Estos resultados, coincidentes con los de series americanas, unido al menor historial de tabaquismo, explicarían por qué “se ha estimado que las mujeres tienen seis veces menos probabilidades de entrar en un programa de screening, pero el doble de probabilidades de ser diagnosticadas de cáncer de pulmón”, apunta García-Campelo.
Por otra parte, los casos de cáncer de pulmón no asociados al tabaquismo son más frecuentes en las mujeres y la histología más prevalente es el adenocarcinoma, que es más susceptible de beneficiarse de la medicina de precisión: “Las alteraciones genéticas potencialmente tratables son más frecuentes en población femenina con poca o nula exposición al hábito tabáquico”, resalta la oncóloga del Complejo Hospitalario de A Coruña.
Tumores esofagogástricos
Otros tumores en los que se han investigado las diferencias entre hombres y mujeres en España son los esofagogástricos. Según la SEOM, la incidencia del cáncer de esófago se sitúa en 1.895 casos en hombres y 473 en mujeres; las muertes, en 1.452 y 320. En el caso del de estómago, la incidencia es de 4.500 y 2.807 casos (hombres y mujeres), y la mortalidad por sexos se sitúa en 3.016 y 1.960 fallecimientos.