La investigación en psoriasis pasa por el corazón de los pacientes
Las personas con psoriasis tienen más riesgo de presentar otros problemas asociados como sobrepeso, hígado graso o enfermedad cardiovascular. Es algo que se sabe desde hace años y que poco a poco se van descubriendo las causas y la manera de atajar estos problemas o prevenirlos. Actualmente los investigadores basan su trabajo en la inflamación en psoriasis y cómo detectar precozmente las personas en riesgo cardiovascular. En concreto, cuándo cambiar de un tratamiento clásico a uno biológico, aspectos de la psoriasis y el deporte.
Se estima que en todo el mundo hay 125 millones de personas con psoriasis, de los que en torno a un millón están en nuestro país. El conocimiento sobre la psoriasis ha evolucionado mucho a lo largo de la historia y, junto con el desarrollo en investigación, ha dado lugar a un mejor manejo global de la enfermedad y a unas terapias verdaderamente eficaces.
La puesta en práctica de estilos de vida saludables es una gran herramienta para reducir el riesgo cardiovascular porque la primera causa de muerte en las personas con psoriasis es la cardiovascular. En la población en general también es esta la primera causa de muerte, la diferencia es que la enfermedad cardiovascular es más frecuente en las personas con psoriasis.
En la actualidad, se plantea que reduciendo esta inflamación y tratando la psoriasis, se podría actuar en la mejoría del riesgo cardiovascular. También se sabe que los pacientes con mayor índice de masa corporal tienen más inflamación sistémica, por lo que, al actuar sobre su peso, se reduce esta inflamación y mejora el manejo de la enfermedad y sus tratamientos.
El Dr. González Cantero, que ha realizado varios estudios en pacientes con psoriasis cuyos datos han sido publicados en la revista de la Academia Americana de Dermatología (datos preliminares) y en PLOS ONE (un estudio con 140 participantes), que indican que la ecografía permite detectar de forma precoz la aterosclerosis subclínica. “Esta técnica permite saber qué pacientes, que ahora no presentan signos evidentes de aterosclerosis, van a presentar en un futuro enfermedad cardiovascular”, añade
El siguiente paso será ratificar estos resultados en un ensayo con un mayor número de participantes. “Lo hará en colaboración con el Dr. Nehal Mehta de los Institutos Nacionales de Salud (NIH, según sus siglas en inglés) de EEUU. Se trata de validar los resultados obtenidos hasta ahora y también saber si los tratamientos para la psoriasis sirven para mejorar la aterosclerosis en distintos territorios arteriales. Porque actualmente, aunque se sospecha que los nuevos medicamentos para la psoriasis al mejorar la enfermedad logran reducir la inflamación y el riesgo cardiovascular, no se sabe con certeza si su acción también es eficaz sobre las arterias, pero es algo bastante probable”, ha señalado.
No obstante, con los resultados obtenidos, ya se empieza a considerar la ecografía femoral como una herramienta a tener en cuenta en el seguimiento rutinario de los pacientes con psoriasis, en particular en las formas graves. M.T.TOUS