Medicamentos para dejar de fumar, un paso adelante
El Ministerio de Sanidad financia un fármaco para dejar de fumar del que se podrán beneficiar unas 70.000 personas
José Ramón Calvo. Presidente del Instituto de Cooperación Internacional de la RAED
El Sistema Nacional de Salud incluirá por primera vez un medicamento para dejar de fumar, que podrá ser recetado en los centros de asistencia primaria y del que el Ministerio de Sanidad calcula que se podrán beneficiar alrededor de 70.000 personas. Esto fue lo que avanzó la ministra de Sanidad en funciones, María Luisa Carcedo, el pasado mes de septiembre en Nueva York cuando asistió a las cumbres sobre sanidad universal y clima que se han celebrado en torno a Ia 74 sesión de la Asamblea General de Ia ONU. Sin duda una gran noticia.
Hasta ahora, en España sólo alguna comunidad como Navarra había subvencionado tratamientos de deshabituación de tabaquismo, por lo que, con esta decisión, el Ministerio da ahora un paso al frente y abordará a nivel nacional esta adicción, que provoca unas 50.000 muerte anuales en el país, con la subvención del principio activo de la Vareniclina.
Un paso más y no menos importante que cuando se aprobó en 2006 la ley antitabaco (Ley 28/2005, de 26 de diciembre) y cuya medida más relevante, no exenta de polémica, fue Ia de prohibir fumar en lugares en los que hasta esa fecha estaba permitido, como en el trabajo (tanto públicos como privados) o los centros culturales, y posteriormente, en diciembre de 2010, a cualquier espacio de uso colectivo. Solo siete años antes de la aprobación de esta Ley, reclamábamos en el Congreso Europeo de Tabaco y Salud celebrado en Las Palmas de Gran Canaria que se eliminasen las filas de fumadores en los aviones o que se retirasen las máquinas expendedoras de tabaco en comercios cercanos a colegios escolares, algo impensable hoy en día.
No obstante, esta medida tampoco ha estado exenta de críticas por los profesionales de Ia deshabituación tabáquica. Tres tratamientos farmacológicos han demostrado científicamente que pueden ayudar a dejar de fumar: la mencionada Vareciclina, Ia TSN y, en menor medida, el bupropion. Estos combinados con intervención conductual multiplican el éxito hasta por cuatro. Los tres se usan en las consultas de medicina primaria y en las especializadas de desintoxicación tabáquica. La elección de uno u otro depende de las características del paciente, de los años que lleve fumando y de Ia cantidad de cigarros al día. EI Ministerio de Sanidad solo ha optado por uno.
