Los dispositivos médicos serán cada vez más inteligentes y precisos

En el tratamiento de la salud cardiovascular la meta es reducir las intervenciones y que sean mínimamente invasivas.

La tecnología médica es esencial para mejorar el tratamiento de la salud y el bienestar en todas las áreas de la medicina. El concepto abarca desde materiales y herramientas simples como un termómetro hasta dispositivos avanzados como escáneres de resonancia magnética o marcapasos cardiacos. Pau Lladó, director de operaciones de iVascular, empresa dedicada al desarrollo de tecnologías médicas para el sistema vascular, afirma que existen diversas tendencias en tecnología médica que convergerán en el futuro.

“Podemos anticipar la llegada de dispositivos médicos más inteligentes y conectados, así como también más precisos y fáciles de usar. Estos serán menos invasivos y veremos la introducción de implantes biodegradables o dispositivos que podrán ser reutilizables total o parcialmente. Estos avances serán posibles gracias a la aplicación de materiales con mejor biocompatibilidad, más resistentes y ligeros. Además, los progresos en nanotecnología, robótica e inteligencia artificial permitirán un diagnóstico y tratamiento mucho más preciso y personalizado”, explica Lladó.

Tendencias en salud cardiovascular

En el campo de los dispositivos cardiovasculares, la meta es reducir las intervenciones quirúrgicas y reemplazarlas con procedimientos mínimamente invasivos, utilizando dispositivos que van desde un catéter hasta un robot. Estos proporcionarán una mejor asistencia al médico antes y durante el procedimiento. Además, se está avanzando hacia tratamientos más localizados, como la oncología intervencionista, donde el cáncer puede ser tratado mediante catéteres de manera precisa.

“Estas tendencias promoverán una recuperación más eficiente y rápida para los pacientes. Asimismo, tendrán un impacto en los usuarios finales de los dispositivos, es decir, los médicos, ya que se desarrollarán sistemas y equipos que mejorarán la asistencia en el diagnóstico y el tratamiento posterior. Probablemente dichos sistemas y equipos serán parte integral del servicio ofrecido con la venta de los productos”, explica.

El papel de la innovación

La innovación desempeña un papel decisivo, al permitir un incremento constante en la seguridad de los dispositivos, acortar los tiempos de recuperación de los pacientes y mejorar su eficacia clínica. A nivel de procesos, es fundamental para mantener la competitividad. “Sin avances en este ámbito será difícil reducir los costos de producción y competir con países donde la mano de obra es más económica y va ganando terreno en el mercado”, puntualiza Lladó. En este sentido, la inteligencia artificial es crucial. “No hay duda de que las empresas que deseen mantener su competitividad deben apostar por la IA. No se trata tanto de las ventajas que se pueden obtener, que son numerosas, sino de lo que podríamos perder si no lo hacemos. Nuestros principales competidores no vacilarán en aplicarla en todos los niveles”, concluye. En iVascular, por ejemplo, se está explorando el uso de IA para mejorar la investigación y desarrollo de productos, optimizar procesos operativos y, por último, en el ámbito clínico, donde una interpretación más precisa de los resultados de los estudios clínicos puede ser determinante. L.C.

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