Una primavera con los pólenes por las nubes
La Sociedad Española de Alergología e Imnunología Clínica crea el primer mapa que radiografiará la alergia y su atención sanitaria
ANICHA SENDÍN. Dice un poema haiku que en las lluvias de primavera todas las cosas son más bellas. Y, ciertamente, así es para las personas con alergia al polen. Las precipitaciones de otoño e invierno, anteriores a la polinización, ayudaron a generar más polen, en cambio, las de la primavera, que calman la concentración polínica y limpian la atmósfera, han sido más bien escasas. Esta circunstancia está provocando que prácticamente todos los pólenes se encuentren en niveles superiores a otros años.
En febrero y marzo aumentó la concentración del polen de ciprés, de la familia de las cupresáceas. A finales de marzo y durante el mes de abril se registraron altos niveles de polen de platanero y empezó a aumentar el de parietaria, una planta puramente mediterránea. En estos momentos están empezando a polinizar las gramíneas. Según explica Antonio Luís Valero, alergólogo del hospital Clínic de Barcelona, estas altas concentraciones polínicas han generado una mayor presencia de síntomas entre las personas alérgicas. Los pacientes con tratamiento mediante vacunación, pese a haber una mayor concentración de gran parte de los pólenes, presentan menos síntomas, de menor intensidad y duración y, por tanto, requieren menos medicación, señala este experto.
La inmunoterapia o vacuna para la alergia, se administra principalmente por vía subcutánea o sublingual, durante un periodo de tres a cinco años, mediante dosis repetidas de una sustancia alérgena. Este tratamiento produce cambios a
nivel de componentes del sistema inmunológico que ayudan a controlar los síntomas incluso una vez éste ha finalizado. Pero su eficacia dependerá sobre todo del buen cumplimiento por parte del paciente. Su recomendación siempre debe realizarla un profesional médico tras hacer un estudio alergológico para poder determinar que pólenes son los causantes de la reacción alérgica. Para un buen tratamiento, además, es esencial evitar el contacto con los alérgenos, los pólenes que producen la reacción, aunque resulta realmente difícil en plena polinización.
Por ello, la Red Española de Aerobiología (REA) ha creado una página que permite consultar la cantidad que hay de un determinado polen en cada zona, así como la previsión para los próximos días. Es una red con más de 50 puntos de captación de pólenes en las diferentes zonas de España, explica Valero.
Además, la Sociedad Española de Alergología e Imnunología Clínica (Seaic) incluirá este 2014 el primer mapa alergológico que radiografiará la alergia y su atención sanitaria en España. Es un nuevo proyecto para conocer los recursos sanitarios disponibles y su distribución. Con estos datos podremos saber qué tipo de alergias se ven en nuestro país -respiratoria, a alimentos, cutánea, a fármacos, a picadas de himenóptero -, qué edad tienen las personas que las sufren, con qué frecuencia se ven cada una de las alergias, las características que presentan , apunta Valero. De momento se está realizando el trabajo de campo y se prevé que para finales de 2015 el mapa ya esté disponible. Para su confección se contará, además, con la colaboración de la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC), que realizará un estudio específico de consultas en oficinas de farmacia, primer punto de contacto con el paciente.
La alergia ha pasado de un 10-15% de prevalencia en los años 80 a un 25-30% en la actualidad. Además, se prevé que en el año 2025 seguramente la mitad de la población pueda tener alguna enfermedad alérgica en algún momento de su vida. Muchos expertos defienden la teoría higiénica como causante del aumento de alergias. Se basa en diversos estudios en los que se ha comprobado que existen más reacciones inmunológicas en las grandes ciudades que en ambientes rurales. El sistema inmunológico se desarrolla por la exposición a los microorganismos, ante la falta de este contacto debido a la limpieza del entorno, el sistema no madura correctamente. La excesiva higiene a la que estamos expuestos debilita los estímulos del sistema inmunológico, que es el encargado de activarse para defender al cuerpo ante una infección, explica este experto. Pero la herencia genética es el factor más importante. Las familias con un condicionante positivo están más predispuestas a desarrollar esta enfermedad.
UNA AYUDA DIGITAL PARA EL AUTOCONTROL
A modo de prevención es conveniente seguir una serie de medidas para evitar que los síntomas aparezcan. Para un buen control de la alergia el papel del paciente es especialmente relevante. La Sociedad está cambiando y cada vez son más numerosas las consultas en buscadores de internet como principal fuente de información de salud sobre la enfermedad, los síntomas y los tratamientos, así como el uso de las redes sociales.
Para que los alérgicos cuenten con toda la información necesaria se han creado webs como www.curatualergia.es donde ofrecen información de las diferentes alergias, tratamientos, pautas de prevención y consejos prácticos, entre otras cosas. Además, cuenta con un espacio para los más pequeños para que puedan saber más sobre su alergia a través de juegos y pasatiempos.