¿Se puede crear modelos de vasos sanguíneos para estudiar fármacos?
El endotelio es una monocapa de células que recubre el interior de los vasos sanguíneos. Estas células, que están en contacto directo con la sangre, participan en numerosas alteraciones relacionadas con el sistema cardiovascular. Algunas de ellas son la respuesta inflamatoria, que participa en enfermedades como la covid; el acúmulo de colesterol en las arterias, que origina las placas de ateroma, o la alteración de la permeabilidad de los vasos sanguíneos, que puede desencadenar hemorragias.
El grupo de investigación en cardiología celular y molecular de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) investiga fármacos para tratar algunas de estas patologías, como la aterosclerosis y la retinopatía diabética. Los científicos necesitan modelos de investigación adecuados para saber a qué moléculas dirigir los esfuerzos en los ensayos preclínicos con animales. En colaboración con otros investigadores de la USC, Maite Flores y Alberto Pérez-Muñuzuri han desarrollado órganos en un chip que permiten el cultivo de células en unas condiciones fisiológicas lo más reales posible para probar fármacos con mayor precisión y reproducibilidad.
Con la ayuda de la fundación Kaertor y la spin-off de microfluídica BFlow, tratan de obtener modelos miniaturizados de vasos sanguíneos que reproducen el entorno y la configuración espacial de las células endoteliales. “Queremos estudiar la biología de las células vasculares y los efectos de los fármacos en un modelo que imite al máximo la realidad”, comenta Ezequiel Álvarez, investigador de la USC y responsable del proyecto, que busca identificar dianas terapéuticas para afinar la investigación de nuevas moléculas. Núria Jar