Radiofrecuencia: una alternativa a la cirugía para eliminar miomas uterinos
Los fibromas uterinos, conocidos comúnmente como miomas, son tumores benignos no cancerosos, más frecuentes entre las mujeres. Se calcula que entre un 50-70 % de las mujeres tendrá miomas en algún momento de su vida.
Están formados por células musculares y pueden crecer en el interior del útero, en sus paredes o incluso proyectarse al exterior del mismo.
En función de donde estén situados y su tamaño, pueden provocar infertilidad, dolor, fuertes sangrados, molestias al orinar o defecar, o condicionar la vida laboral y sexual de la mujer.
Si los fibromas comprimen las trompas de Falopio, podrían impedir que la mujer se quedara embarazada. Hasta el momento, no se conocen las causas exactas que originan la aparición de los miomas. Lo que sí sabemos es que guardan una relación directa con las hormonas sexuales femeninas. La prueba es que, en las mujeres menopáusicas, que ya no fabrican estas hormonas, los miomas tienden a reducirse.
Otros factores de riesgo pueden ser la raza, el número de hijos, la edad, la obesidad, la dieta, los antecedentes familiares y la vida sedentaria, también favorecen la aparición de fibromas.
Hasta ahora, los miomas se trataban de forma muy agresiva, mediante una histerectomía radical (sacar todo el útero), hasta la extracción del mioma por laparoscopia o laparotomía, que implican el ingreso en clínica, una anestesia general y pasar un período de recuperación con baja laboral.
La radiofrecuencia, en cambio, es una técnica ambulatoria, que se realiza bajo sedación, sin ingreso hospitalario y que no origina baja médica.
El procedimiento es muy similar al de una Fecundación in Vitro. Se realiza por vía vaginal, con control ecográfico, introduciendo una aguja que aplica calor en el interior del mioma, que destruye la vascularización del mismo, provocando la necrosis del tejido, siendo reabsorbido por el organismo transcurrido unos meses.
En una sola intervención pueden tratarse varios miomas a la vez. Antes de realizar la radiofrecuencia se realiza una biopsia del mioma para confirmar la benignidad del mismo.
La intervención dura unos minutos y tras un breve periodo de observación, la paciente vuelve a su casa. En total la estancia en la clínica es de unas 2 – 3 horas y no es preciso un reposo posterior. Al día siguiente, la paciente puede volver a su vida normal.
Otra ventaja es la ausencia de cicatrices, porque no se realizan cortes ni se lesionan las paredes del útero. Esto permite alas mujeres poder quedarse embarazadas a los pocos meses. Estas mujeres son las grandes beneficiadas de la técnica, que de otra forma no podían quedarse gestantes por culpa del mioma.
No todos los miomas se pueden tratar con la radiofrecuencia
Dependerá de su tamaño (máximo 10 cm) y su localización (no pueden estar fuera del útero),por lo que deberán ser valorados y estudiados caso a caso. La radiofrecuencia en ginecología se aplica en España desde hace 3 años. M.T.Tous
