¿Podrán sustituirse las coronarias con arterias sintéticas?
Investigadores de Portugal crean vasos sanguíneos en laboratorio.
Investigadores del Instituto de Investigación e Innovación en Salud (i3S/INEB) de Oporto, en Portugal, dirigidos por Andreia Pereira, han desarrollado el primer injerto vascular sintético antiadherente de pequeño tamaño. Su invención puede ayudar al 1% de pacientes con enfermedad arterial coronaria que tienen que someterse a una cirugía de bypass.
A menudo, este procedimiento se realiza con vasos sanguíneos extraídos de otra parte del cuerpo del paciente, una alternativa que no siempre es posible. “Hay injertos sintéticos disponibles en el mercado que funcionan bien para los vasos con un diámetro mediano o grande, pero en las arterias coronarias, que tienen un diámetro pequeño, fallan debido a la formación de trombos”, declara Pereira.
La investigadora inició este desarrollo durante el doctorado. Seleccionó junto a su directora de tesis un hidrogel que se utiliza en las lentes de contacto, con buena biocompatibilidad con la sangre, pero demasiado blando para construir injertos vasculares. Le dieron al hidrogel la consistencia que requería añadiendo óxido de grafeno, un material altamente resistente, y así nació GO-Graft, como han llamado al pequeño injerto vascular.
Pereira y su equipo han diseñado el injerto principalmente para realizar bypass de la arteria coronaria, con propiedades antiadherentes de bacterias, antitrombóticas e inocuas para la sangre. Ya tienen la patente registrada en Europa y Estados Unidos, están validando el prototipo final y realizando ensayos preclínicos para comprobar si este dispositivo médico es seguro.
Tras la validación del diseño final y el éxito de los ensayos preclínicos, Andreia Pereira y el equipo crearán una empresa para obtener más financiación y emprender el registro y los ensayos clínicos. Según sus previsiones, el injerto podría ser una opción clínica en el 2028. Isabel Troytiño