«Hablamos del cáncer como un todo cuando hay 150 tipos diferentes». Cristina Mayor-Ruiz, investigadora oncológica del IRBB
“Solo puedes ser un país rico si inviertes en I+D+i”
¿Entender» es la base de todo para un científico?
Así es. Por eso soy una gran partidaria de invertir en investigación básica. Todo viene de entender. Sólo cuando entendemos las cosas podemos mejorarlas y avanzar.
¿Curaremos el cáncer?
Tratamos al cáncer como una sola enfermedad y en realidad hay 150 tipos de cáncer. Cuando hablamos de enfermedades víricas distinguimos entre la gripe o el ébola y en cambio decimos «cáncer» como un todo. Algunos tratamientos han mejorado mucho. Los avances con el cáncer de mama y leucemia son memorables.
¿Cuál es el peor cáncer que pueden diagnosticarme?
El de páncreas y el de cerebro. Depende del estado en que te encuentres, es muy complicado. Pero a veces hay tratamientos que funcionan.
¿Por qué en unos se avanza tanto y en los otros cuesta más?
Porque no entendemos bien lo que sucede. Pero iremos cronificando y curando cada vez más tipos de cáncer. Las proteínas son máquinas que hacen todas las funciones que las células necesitan. A veces, estas proteínas mutan de manera descontrolada. Este error en la mutación es lo que genera el tumor.
¿Y los fármacos actuales?
Inhiben la función de estas proteínas descontroladas para que no produzcan tumores. El problema es que sólo podemos atacar entre un 10 y un 20% de estas proteínas erróneamente mutadas.
¿Por qué?
Porque cada fármaco es como una llave que sólo sirve para un tipo de ranura (proteína) concreta.
-Y a partir de ahí…..
Investigamos para crear fármacos degradadores que destruyan estas proteínas. Ya no es ponerle un palito a la rueda sino eliminarla. El efecto es mucho más potente que con la inhibición. Gracias a estos fármacos, tu cuerpo aprende a destruir proteínas descontroladas, a utilizar tu maquinaria de degradación proteica (que existe en nuestro cuerpo para eliminar las proteínas que han dejado de funcionar) para atacar a las proteínas malignas.
Los pegamentos moleculares.
-Estos son los fármacos en los que yo trabajo. Los pocos que existen se han descubierto por casualidad, sin una estrategia racional. Yo intento cambiar el paradigma de que el pegamento molecular no se puede diseñar.
¿Vamos bien?
-Acabamos de empezar. Como responsable de laboratorio de degradación de proteínas dirigida y descubrimiento de fármaco del Institut de Recerca Biomèdica de Barcelona.
Antes la gente se iba a curar el cáncer a los Estados Unidos y ahora España tiene los tratamientos más avanzados del mundo.
La ciencia es universal, cuando sale algo nuevo se aplica en todas partes. Si tienes buenos oncólogos, aplican enseguida lo novedoso.
¿Tenemos buenos oncólogos?
-España tiene una gran calidad científica, unos médicos geniales pero muy poca inversión en Ciencia.
Entonces, ¿nos va bien por suerte?
-La suerte está ahí para mentes preparadas.
Prestigio internacional.
-Los médicos y científicos españoles tenemos mucho prestigio fuera. Saben que venimos muy bien formados y que somos muy trabajadores.
Bueno, si quiere estudiar lo tuyo, ¿le pago una universidad extranjera o las españolas son buenas?
-Me considero una científica muy bien formada y estudié en la Universidad de Salamanca. Si tu hija quiere ir fuera, que vaya, pero no «tiene que ir».
¿Qué es lo que España hace mal en relación con la ciencia?
-Yo estudié el posdoctorado en Austria. Ahí el porcentaje del PIB que dedican al I+D+I es el 3,2%. La media europea está en el 2,1%. Y España dedica un 1,2%.
Sólo los países ricos pueden invertir en I+D+I.
No, es al revés. Sólo puedes llegar a ser un país rico si inviertes en ello.
El mundo espera mucho de ti y de científicos como tú.
-El conocimiento nos permite hacer avances mucho más rápidos y eficientes que en los últimos 80 años.
Dentro de poco tiempo.
-Salvaremos a muchísima más gente. Algunos cánceres que hoy son incurables, los habremos cronificado para cuando tenga tu edad tu hija (50 años).
El cáncer es la enfermedad que más te pone ante la muerte.
-El cáncer es consecuencia de nuestra complejidad. Es casi poético. Tenemos cáncer porque estamos vivos y nuestro cuerpo está en constante recambio celular. A veces se producen errores y salen los tumores. Pero más que nuestra incapacidad, el cáncer demuestra la vida y el extraordinario funcionamiento de nuestro cuerpo. ABC S. Sostres