El cribado de la fibrilación auricular en población anciana podría reducir los ictus
Un estudio sobre población sueca sugiere que podrían evitarse al menos 2.300 casos de ictus o muertes al año, con un programa de cribado de fibrilación auricular.
El cribado de la fibrilación auricular en personas de 75 y 76 años podría reducir el riesgo de accidente cerebrovascular, hemorragia grave y muerte, según un estudio del Instituto Karolinska en Suecia, que se ha presentado en el congreso de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC 2021) y publicado en la revista The Lancet.
La fibrilación auricular se asocia con un riesgo cinco veces mayor de accidente cerebrovascular. La terapia con anticoagulantes reduce ese riesgo de ictus, aun así, no se examina a la población general para detectar esta arritmia, sino que tratan a los pacientes que se diagnostican durante atenciones rutinarias.
“Nunca ha habido un estudio que examine si sería beneficioso el cribado de la fibrilación auricular, por eso queríamos investigarlo”, dice Emma Svennberg, cardióloga del Hospital Universitario Karolinska.
Personas de 75 y 76 años
El estudio incluyó a todas las personas de 75 y 76 años, casi 28.000 en total, en las dos regiones suecas de Halland y Estocolmo. Los participantes fueron asignados al azar para ser invitados a un cribado (13.979 personas) o bien a un grupo de control (13.996 personas), que recibieron atención estándar. De los que fueron invitados al despistaje, más de la mitad optaron por participar. Completaron un cuestionario de salud y realizaron un electrocardiograma (ECG).
Aquellos sin fibrilación auricular pudieron llevarse a casa el dispositivo de ECG y se les pidió que registraran su ritmo cardíaco dos veces al día durante dos semanas. Si el dispositivo registraba ritmos cardíacos irregulares, los participantes eran remitidos a un cardiólogo para una evaluación estandarizada y, si no había contraindicaciones, se iniciaba la terapia con anticoagulantes orales.
A continuación, se realizó un seguimiento de las 28.000 personas durante al menos cinco años. La detección de fibrilación auricular fue mayor en el grupo del cribado, que también tuvo una incidencia ligeramente menor de muerte, accidente cerebrovascular y hemorragia grave que el grupo de control.
“En total, el 31,9% de los del grupo de detección experimentó un evento negativo en comparación con el 33% del grupo de control”, dice Johan Engdahl, profesor adjunto del Departamento de Ciencias Clínicas del Hospital Danderyds del Karolinska. “Eso puede parecer una pequeña diferencia, pero debe tenerse en cuenta que solo participaron aproximadamente la mitad de los invitados al cribado y es posible que hubiéramos visto una diferencia más pronunciada si hubiera más personas presentes en el grupo del despistaje. Aquellos que participaron en el screening tuvieron significativamente menos eventos negativos “.
Según los investigadores, los hallazgos indican que al menos 2.300 casos de accidente cerebrovascular o muertes podrían evitarse por año en Suecia si se introdujera un examen nacional de fibrilación auricular en los ancianos.
Rentabilidad del cribado
Los investigadores también han realizado un análisis financiero, que muestra que el cribado es rentable.
“Los resultados significan que quienes toman las decisiones estarán en una mejor posición para decidir si seguir adelante con la recomendación de la detección de fibrilación auricular en Suecia, así como a nivel internacional”, dice Svennberg. “En estudios futuros, debemos examinar cómo se ve en otros entornos de atención médica en otros países y en diferentes grupos étnicos, y también si otros grupos de edad podrían beneficiarse de la detección”. Redacción